[Fosa], Juan Bonilla

jueves, 9 de enero de 2014
Nocturno, Max Ernst


   Cuando un hombre cava día tras día su propia fosa, cuando con sus propias manos decide abrir un agujero en el campo donde encerrarse, uno no puede hacer nada, le fallan las convicciones, se siente impotente para declararle sus errores, porque quiénes somos nosotros para declarar como errores lo que tal vez no sea sino única salida.


Juan Bonilla, El arte del yo-yo, Pre-Textos, Valencia, 1996, p. 22.

0 comentarios: