[El momento adecuado para actuar], Slavoj Žižek

martes, 10 de marzo de 2015
 Anna & Elena Balbusso


   Uno tiene que saber esperar, sin perder la paciencia: si uno actúa demasiado rápido, el acto se vuelve un passage à l'acte, una violenta huida hacia delante para evitar el callejón sin salida. Si uno pierde la ocasión y actúa demasiado tarde, el acto pierde su cualidad de acontecimiento, de una intervención radical a consecuencia de la cual «nada permanece como estaba», y se convierte sólo en un cambio local dentro del orden del ser, parte del curso normal de las cosas. El problema es, por supuesto, que un acto siempre ocurre simultáneamente demasiado rápido (las condiciones nunca son las adecuadas, uno tiene que sucumbir a la urgencia de intervenir, nunca hay tiempo suficiente para cálculos estratégicos, el acto tiene que contar con la certeza y el riesgo de que retroactivamente establecerá sus propias condiciones) y demasiado tarde (la urgencia misma del acto señala que hemos llegado demasiado tarde, que siempre deberíamos haber actuado ya; cada acto es una reacción a circunstancias que surgieron porque tardamos demasiado en actuar). En resumen, el momento adecuado para actuar no existe: si esperamos el momento adecuado, el acto queda reducido a un hecho en el orden del ser.


Slavoj Žižek, Acontecimiento, Sexto Piso, Madrid, 2014, pp. 102-103.
 

0 comentarios: