Preposición indecente, Víctor Lorenzo Cinca

miércoles, 26 de junio de 2013

PREPOSICIÓN INDECENTE

   Tras cerrar el último bar, ya de madrugada, me propuso subir a. Estás en tu casa, no voy a hacer nada que no quieras, me juró ante. Nos desnudamos con prisa, nos metimos en la cama y nos buscamos bajo. Me agarró del brazo cuando me vio abrir el cajón de la mesita situada cabe. No quiero hacerlo con, dijo muy serio. Yo me negué, pero me acorraló contra. Nunca imaginé que fuera capaz de, porque nos conocíamos desde, cuando coincidimos en. Gemí de dolor, de rabia, atrapada entre. Tuve que apartar la mirada y dirigirla hacia, mientras me preguntaba hasta, sin entender sus motivos para. Le supliqué que se detuviera, por. Pero él continuaba actuando según. No pude zafarme de él hasta que quedó agotado, exhausto, sin. Mientras se vestía, me aconsejó no contar lo ocurrido a nadie, so. Se oyó un portazo y me quedé sola, llorando, tendida sobre. Aún me cuesta encontrar las palabras para explicar cómo me siento tras.

Víctor Lorenzo Cinca


Manuel Espada & Rosana Alonso (ed.), De antología, Talentura, Madrid, 2013, p.174.

5 comentarios:

Víctor dijo...

Gracias por sacar a paseo esta "Preposición indecente", Raquel. Acabo de descubrir que compartimos páginas también en "PervertiDos". Un abrazo.

Anita Dinamita dijo...

Lo que más me gusta de este relato es todo el trabajo que hay detrás. Que no se queda en un juego de preposiciones, sino que cuenta una historia muy dura, y te deja con un agujero, justo ahí donde estaría la preposición.
Felicidades a Víctor y abrazos a ti.

Raquel Vázquez dijo...

Víctor, encantada de, gracias a ti por. Será que crea algo de adicción esta técnica… En todo caso este relato va mucho más allá de eso: totalmente de acuerdo con la valoración de Anita, trasciende ese juego. Y el agujero podrá completarse o no, pero ya de por sí resulta elocuente, brutal.

Un abrazo a [los dos].

Auroratris dijo...

Un relato muy elaborado, difícil tarea poder ir hilvanando una historia y hacer que casen con las distintas preposiciones.
Saludos.

Susana Camps dijo...

Me parece uno de los mejores microrrelatos que incluye la antología porque no es sólo un juego de palabras o un ejercicio formal, sino que pone en juego nuestra imaginación, sugiere, incita. Y además es argumental. Francamente, para mí es todo un logro.
Abrazos