Tristeza (dos en bote), Nicholas Roerich
ORIGEN
Los antiguos habitantes de la Mesopotamia sostenían que el ácido de la primera cebolla domesticada, eyectado accidentalmente sobre los ojos de su cosechador, habría inventado el llanto.
Desde entonces, nos pasamos unos cinco mil años tratando de entender la tristeza.
Caro Fernández & Leo Mercado, Hacer el cuento. Microcrónicas, Macedonia, Morón, 2012.
2 comentarios:
Me encantó!
Buscando sobre la temática en Google llego a este texto. Me fascinó, voy a buscar más sobre los autores. Gracias
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