Imitación, Daidō Moriyama
El dominio de la actualidad margina el movimiento y, con el movimiento,
el tiempo. El dominio de la actualidad es la desaparición del tiempo.
Todo es actual. Lo convertimos todo en predicados de sujetos y anulamos
la atención al tránsito. Decimos A es B, cuando lo que habría que
reconocer es el movimiento de A a B, de una cosa a otra. En esto último
hay diferencia: "una cosa" y "otra cosa", es decir, movimiento y tiempo.
En cambio, con la nivelación, es decir, con la supresión
de la diferencia, todo es considerado objetivable y dominable. La
actualidad lo es todo y lo acapara todo. Incluso la posibilidad. Hay
cosas que todavía no conocemos o que aún no podemos producir. Pero esto
mismo ya está determinado en el seno de la misma actualidad. Y de esta
manera ser ha dejado de nombrar la diferencia para nombrar solamente
la expansión.
[...] Estar informado de la actualidad es saber lo que ya ha llegado, como si el futuro nos fuese viniendo. [...] Y henos aquí mudados en servidores —por no decir esclavos— de la actualización del futuro.
Josep Maria Esquirol, La resistencia íntima. Ensayo de una filosofía de la proximidad, Acantilado, Barcelona, 2015.
[...] Estar informado de la actualidad es saber lo que ya ha llegado, como si el futuro nos fuese viniendo. [...] Y henos aquí mudados en servidores —por no decir esclavos— de la actualización del futuro.
Josep Maria Esquirol, La resistencia íntima. Ensayo de una filosofía de la proximidad, Acantilado, Barcelona, 2015.
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