Herida, Robert & Shana ParkeHarrison
El dolor a palo seco no lo aguanta nadie. Tienes que tener alguna historia metida en la cabeza para soportarlo. Darle un sentido, imaginarte que sirve para algo. Que te cura, que te salva. Lo que escuece, cura, decía mi abuela cuando me echaba unas gotas de alcohol en la herida que me había hecho jugando, al caerme, o cuando me cortaba. No soportamos saber que algo escuece y no cura, que duele y sólo es eso, dolor, nada de medicina.
Rafael Chirbes, Crematorio, Anagrama, Barcelona, 2007, p. 319.
3 comentarios:
Es verdad, decepciona cuando sólo es dolor. Perfecto post.
Besos.
No solo los relatos que compartes, Raquel, son las ilustraciones que les buscas. Da gusto venir por aquí, a tiro hecho, no defraudas.
Aurora, Javier:
Muchas gracias. Con seguidores como vosotros, soy yo quien no podría sentirse defraudada.
Un abrazo.
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