Un inmigrante mira el móvil. Calais, 30/7/15, Pascal Rossignol
«Lo perdimos todo», solía decir mi madre. Tenía razón. Todo lo que tuvimos una vez en forma de identidad y de posesiones dejó de existir. Un día éramos los vecinos de la puerta de al lado y al día siguiente chusma sin patria.
Charles Simic, El monstruo ama su laberinto. Cuadernos, Vaso Roto, Madrid, 2015, p. 80.
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