Pensamientos de origami, Riccardo Focacci
EN OTRA VIDA
En otra vida vivimos juntos. En un piso pequeño, con una calefacción horrible y vistas a una pared plagada de ventanas turbias. Y no nos importa. No tenemos hijos. Ni ganas de tenerlos. Me gusta acariciar tu cabello. Perdemos el tiempo en los rastrillos y las fresas no saben a nevera. Tus ojos también son grises. Y llueve menos. Y te beso. Te beso tanto que los labios me duelen, hinchados, henchidos de ti.
En esta vida te alargo la barra de pan. Tú me das un euro y los buenos días. Y tu mujer, desde la puerta de la panadería, pretende que apures. Yo te doy la vuelta, esperando rozar tus dedos. Pero en esta vida, eso no sucede. Y te vas. Y yo me quedo aquí, tocándome estos labios que te besan, en otra vida.
En otra vida vivimos juntos. En un piso pequeño, con una calefacción horrible y vistas a una pared plagada de ventanas turbias. Y no nos importa. No tenemos hijos. Ni ganas de tenerlos. Me gusta acariciar tu cabello. Perdemos el tiempo en los rastrillos y las fresas no saben a nevera. Tus ojos también son grises. Y llueve menos. Y te beso. Te beso tanto que los labios me duelen, hinchados, henchidos de ti.
En esta vida te alargo la barra de pan. Tú me das un euro y los buenos días. Y tu mujer, desde la puerta de la panadería, pretende que apures. Yo te doy la vuelta, esperando rozar tus dedos. Pero en esta vida, eso no sucede. Y te vas. Y yo me quedo aquí, tocándome estos labios que te besan, en otra vida.
Arantza Portabales, A Celeste la compré en un rastrillo, Zaera Silvar, A Coruña, 2015.
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