odio esa pregunta
nunca sé qué coño contestar
la primera palabra que asocio a esas siete letras mágicas es CALOR
Creo que toda la vida he estado buscando calor, aunque solo fuera un poco
¿Un chute de heroína?
Es algo así como un profundísimo beso en la boca
¿Un chute de heroína?
Es algo así como si tu papá y tu mamá encendieran un fueguecito para asar pollo mientras tú retozas con tu helicóptero de juguete
¿Un chute de heroína?
Sería algo así como si tú golpearas mi puerta un día cualquiera y al abrir te arrojaras en mis brazos con lágrimas en los ojos diciéndome que me quieres
¿Entiendes ahora?
El Ángel, Los planos de la demolición, El Europeo & la Tripulación, Madrid, 1994.
2 comentarios:
Si un chute de heroína se parece a todo eso, prefiero los abrazos y todo lo demás. Al menos esa droga no mata.
Saludos.
Seguro que muchos nunca habrían sabido cómo es un chute de heroína de haber tenido antes ese abrazo. A veces tan sólo elegir ya es un privilegio… y, aún así, tampoco podremos tener la certeza de que la elegida sea la droga que no va a matarnos.
Saludos, y gracias por tu adicción a esta página ;)
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